Un joven de 26 años fue asesinado a balazos en Mar del Plata. Los disparos los realizaron policías de civil que lo persiguieron en vehículos particulares, sin señas policiales. Los amigos que viajaban con la víctima aseguran que huyeron porque pensaron que se trataba de un asalto y que entonces comenzaron a dispararles. Hay cinco policías implicados.
Matías Paredes, albañil y papá de un nene de tres años, viajaba en el asiento trasero de un Fiat Palio. Los jóvenes regresaban de la presentación del equipo de Alvarado. Los policías tienen asiento en distintas comisarías y viajaban en un VW Bora y una camioneta Ecosport.
A las 1.30 de la madrugada de este jueves, en la zona del barrio Bosque Grande, detrás del estadio mundialista, los agentes intentaron detener el coche en el que viajaba Paredes. Los jóvenes, según el relato que los sobrevivientes hicieron a los investigadores, no se detuvieron porque pensaron que intentaban asaltarlos.
La secuencia se habría iniciado a metros de Fortunato de la Plaza (Av. 39) y Polonia, cuando la Ecosport en la que viajaban tres policías comenzó a perseguir el Palio. Al mismo tiempo, el VW Bora, con dos agentes de la comisaría 16, les cortó el paso.
Sin identificaciones en sus vehículos ni con sus uniformes, los policías consiguieron asustar a los jóvenes, quienes aceleraron para evitar lo que creyeron se trataba de un asalto. En esa breve persecución, les dispararon.
Cuando consiguieron detenerlos, a unas diez calles de donde había comenzado la persecución, Paredes estaba gravemente herido. Al parecer, recibió más de un disparo, uno de ellos en la espalda, el que le habría causado la muerte.
Según familiares de la víctima, los policías buscaban a Cristian “El Guachín” Monje, sospechoso del crimen del kiosquero Cristian Velázquez (50), asesinado de un disparo en la cabeza el lunes. En las imágenes que se conocieron del crimen, Monje lleva puesta la camiseta de Alvarado; permanece prófugo. La causa está en manos del fiscal Alejandro Pellegrinelli.