La foto de unidad que difundieron este mediodía desde Juntos por el Cambio es clara. Patricia Bullrich en el centro de la escena, rodeada de costado por Luis Petri, Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales. Casi como ordenando a la tropa aparece la candidata a presidente que ganó la interna el domingo y que irá en octubre por el desafío de mínima de llegar al balotaje de noviembre.
En esos términos fue la reunión que mantuvieron a solas durante una hora en el Jardín Botánico de Palermo los dos actores centrales de la primaria de Juntos por el Cambio, que sumaron al convite a sus compañeros de fórmula. Bullrich bajó la línea de los puntos principales con los que piensa afrontar la campaña y el resto se puso a disposición. Incluido Rodríguez Larreta, de quien la presidenciable necesita más que nunca asegurarse los 11,2 puntos porcentuales que logró en las urnas.
«Ellos procesaron ya lo que sucedió, aceptando que hay una nueva realidad, que nosotros somos los que dirigimos este proceso, que ellos van acompañar, con equipos técnicos, legisladores y gobernadores», sintetizaron en la mesa chica de Bullrich. Y agregaron: «Todo el mundo a laburar».
La primera decisión a la que se llegó de manera conjunta es poner a trabajar a ambos equipos técnicos juntos, lejos de los tiempos de la pre PASO, con cruces constantes de declaraciones de un lado al otro de la grieta del PRO. «Desde lo conceptual, lo programático, se va a seguir la línea de Patricia, se va a poner énfasis en determinados temas, pero no nos vamos a amontonar, nos vamos a reordenar», deslizan fuentes del bullrichismo.
En ese sentido, fue el propio Rodríguez Larreta el que dejó un mensaje que clarificó, por si hacía falta, que la líder del espacio de acá a octubre pasará a ser Bullrich. «Con Patricia estamos más juntos que nunca y vamos a trabajar codo a codo para llevar el cambio profundo a toda la Argentina», dijo el actual jefe de Gobierno porteño, utilizando la idea de «cambio profundo» que durante toda la campaña viene usando la lista de «La Fuerza del Cambio» de Bullrich.
Sacarle votos a Milei, la estrategia
En la charla se analizaron los resultados de las elecciones del domingo. Hubo autocrítica sobre los tonos elevados que tuvo la interna, que pudieron mermar la performance de Juntos por el Cambio, pero también se evaluó por dónde se filtraron votos a Milei que hasta dos semanas antes de las PASO, creen, iban a ir dirigidos a Bullrich.
«Perdimos cuatro o cinco puntos en el final, hubo un ataque muy fuerte a Patricia en ese momento y esos votos se transfirieron a Milei», analizan en la mesa chica de Bullrich, donde aseguran que hasta los últimos días antes de la elección la candidata medía cerca de 21 puntos y Larreta apenas 12, que fue el porcentaje que finalmente terminó sacando.
No se avanzó mucho más en definiciones porque «tenemos que seguir investigando el detalle de lo que pasó el domingo». Tampoco se tocó, por ahora, un tema remanido desde junio: avanzar en un acuerdo con Juan Schiaretti, que sacó poco más del 4% de los votos y a quien Larreta quiso sumar en su momento a Juntos por el Cambio.
En relación al gobernador cordobés, que este miércoles confirmó que no va a bajar su candidatura presidencial, se apunta especialmente a conseguir los votos que logró en Córdoba, un 60% de su caudal total, una provincia donde el macrismo había dominado con amplitud las últimas elecciones y en la que perdió al menos 500.000 votos entre una PASO y otra debido a la irrupción de Javier Milei en la escena política. «Es un voto territorial», deslizan, aunque evitan ir mucho más allá en reflexiones que, sostienen, servirá hacer más adelante y no ahora.
Evitar los cruces constantes con el libertario
Otra parte de la estrategia de cara a lo que viene será «dejar hablar a Milei«, porque, entienden, «cuánto más habla es mejor» y «cuando se calla es mejor para él». Sobre eso, agregan: «Que siga diciendo barbaridades y locuras». La decisión, así, es no entrar en un cruce constante con el libertario
Otro tema sobre el que se dialogó en la reunión es la crisis económica, con una devaluación del peso galopante, que atraviesa el país y que salpica directamente a Sergio Massa, el candidato a presidente de Unión por la Patria y actual ministro de Economía. «No podemos dar la sensación de un cogobierno, es un disparate», se desprenden de una problemática propia del oficialismo.
En la cumbre con Larreta, Morales y Petri, Bullrich también habló de su diálogo con representantes del FMI. «Planteó que desde el Fondo dijeron que no iban a tomar postura por ninguno de los candidatos a presidente», explicaron cerca de la dirigente del PRO. Al igual que Bullrich, Milei también había dicho esta semana que desde la entidad financiera lo habían contactado.