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23 noviembre, 2024

Roger Federer despidió a Rafael Nadal, su rival y su gran amigo en el tenis: «Siempre he deseado que este día no llegara»

El suizo Roger Federer, ganador de veinte Grand Slams, celebró la carrera de Rafael Nadal y aseguró que ha sido «un absoluto honor» haber competido contra él.

Federer, que anunció su retiro en 2022, reaccionó al vídeo de despedida de Nadal, que pondrá punto final a su carrera en las próximas Finales de la Copa Davis en Málaga del 19 al 24 de noviembre

«Qué carrera, Rafa. Siempre he deseado que este día no llegara. Gracias por los inolvidables recuerdos y por todos tus logros en el deporte que amamos. Ha sido un absoluto honor», dijo el helvético.

Federer y Nadal completaron una de las rivalidades más bonitas de la historia del deporte, enfrentándose en cuarenta ocasiones, con 24 victorias para el español y 16 para el suizo.

Para el recuerdo quedan sus duelos en Roland Garros, sus tres finales en Wimbledon, incluyendo la de 2008, considerada el mejor partido de la historia, así como la legendaria imagen que dejaron en la Copa Laver de 2022 en Londres, el último torneo en la carrera de Federer, en la que ambos terminaron llorando agarrados de la mano.

Roger Federer y Rafael Nadal en la Copa Laver 2022. Foto @atptourRoger Federer y Rafael Nadal en la Copa Laver 2022. Foto @atptour

La final de Wimbledon 2008, el mejor partido de la historia

John McEnroe asistía perplejo desde la cabina de retransmisión de la BBC a lo que estaba pasando en la pista central de Wimbledon la tarde del 6 de julio de 2008. ‘Big Mac’ sabía de lo que hablaba al decir que el partido que estaba viendo era «el mejor de la historia», porque él había tenido el honor de ostentar ese «récord honorífico» desde que se midiera a Bjorn Borg en la final de Wimbledon en 1980.

A un lado estaba Federer, campeón de las últimas cinco ediciones, envuelto en un manto blanco, pincelado con toques dorados, al otro ese Rafael Nadal ‘vintage’, con pelo largo, camiseta sin mangas y pantalones piratas. Aspirante los dos últimos años, cercando el terreno con el suizo, que en la final de 2006 había perdido un set y en la de 2007, dos.

«No tengo ninguna duda de que ese fue el mejor partido de la historia», certificó McEnroe tras las 4 horas y 48 minutos que duró aquella final y que comenzó con el gran Manolo Santana saludando a ambos jugadores en la pista central de Wimbledon.

Pero marcar el inicio de ese encuentro el 6 de julio de 2008 es un error. Esa final se empezó a jugar y a decidirse un mes antes, en la tierra batida de Roland Garros, cuando Nadal destrozó a Federer por 6-1, 6-3 y 6-0. Su mejor victoria en una final de Grand Slam y la mayor derrota del suizo. El balear, tras tres años en el segundo puesto del ránking, estaba a punto de superarle en el trono y París fue solo el principio de un verano mágico en el que Nadal conquistó todo.

Federer, que no perdió ni un solo set hasta la final, sabía que ya no tenía margen de error y que la oportunidad de ser el único hombre en la historia en ganar seis Wimbledon seguidos, algo que ni Borg consiguió, iba a ser la última.

Nadal, a diferencia de los años anteriores, ganó el primer set por 6-4 y remontó el segundo desde el 1-4. Tenía dos sets de ventaja, 6-4 y 6-4, contra el hombre que perseguía el récord de 14 Grand Slams de Sampras y el mayor dominador de la hierba desde el estadounidense.

Y comenzó a llover. El partido se suspendió en el tercer set, con 5-4 para Federer, y después de reanudarse tras una hora y veinte minutos de demora, el suizo ganó el ‘tie break’ para recortar distancias.

En el desempate del cuarto, Nadal tuvo su primera pelota de campeonato, tras un ‘passing shot’ a la carrera de Federer. El número uno, con la corona casi en el suelo, respondió con otro ‘passing shot’ de revés para igualar el ‘tie break’ y a la vez el partido. Fueron los dos mejores golpes del torneo y se jugaron de forma consecutiva y con el título en juego.

Cuando se volvió a suspender el partido, cerca de las 20:00 horas de Londres, parecía prácticamente imposible que el partido se acabara. Cabe recordar que el techo retráctil de la pista central no se instaló hasta 2009, un año después.

Con la oscuridad comiéndose la hierba y la única iluminación de los ‘flashes’ de los fotógrafos, Nadal inclinó a Federer por 9-7 a las 21:15 horas. Pascal Maria, el juez de silla del partido, avisó con 7-7 que si el partido no acababa en los próximos dos juegos, la final se reanudaría el lunes.

Rafael Nadal y su reacción tras la maratónica final de Wimbledon 2008. Foto: REUTERS / Kevin Lamarque.Rafael Nadal y su reacción tras la maratónica final de Wimbledon 2008. Foto: REUTERS / Kevin Lamarque.A un joven Nadal de 15 años, campeón de 14 Roland Garros en el futuro, le preguntaron en Tele Vigo qué torneo preferiría ganar: «Wimbledon», dijo el balear, que acababa de convertir su sueño tras una derecha a la red de Federer.

Dos años después, Nadal repitió hazaña, pero con algo menos de épica, al verse no con Federer en la final, sino con el endeble Thomas Berdych, gran jugador, pero sin las hechuras de campeón de Grand Slam.

Federer y Nadal, entre las sombras de Wimbledon 2008. Foto: EFE / EPA / HUGO PHILPOTT.Federer y Nadal, entre las sombras de Wimbledon 2008. Foto: EFE / EPA / HUGO PHILPOTT.Con información de EFE

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