En plena tormenta mediática con la China Suárez, Benjamín Vicuña eligió expresarse con una imagen. Desde una terraza, en lo que parecía una tarde tranquila de domingo, el actor chileno publicó una foto junto a sus dos hijos menores, fruto de su relación con la actriz, y mostró una escena familiar cargada de ternura.
Abrazados, sonrientes y cómplices, la imagen mostró a Vicuña junto a sus nenes en una situación que, en otro contexto, podría haber pasado desapercibida. Sin embargo, llega justo después de que su expareja hiciera fuertes declaraciones en redes sociales, cuestionando su rol como padre y revelando detalles íntimos de su convivencia.
La China había manifestado su enojo luego de que Vicuña le negara el permiso para viajar con los chicos a Turquía, donde planea instalarse con Mauro Icardi. Lo acusó de desentenderse del cuidado diario de los hijos, de estar más enfocado en su imagen que en su presencia como padre, y de deteriorar su autoestima durante la relación.
La publicación de Vicuña fue interpretada como una respuesta clara pero sin confrontación. Hasta el momento, el actor solo había enviado un breve mensaje a Ángel de Brito para ser leído en LAM: “La clase de padre que soy la saben mis hijos, que es lo importante. No me van a hacer hablar mal de la madre de mis hijos”.
Acompañado por sus hijos y con una sonrisa honesta, el actor mostró que su prioridad está donde siempre dijo: en el bienestar de los chicos. Días antes, también había aclarado que su negativa a autorizar el viaje tenía que ver con la rutina escolar y la vida que los chicos tienen en Argentina.
El gesto de Vicuña fue respaldado públicamente por Pampita, madre de sus hijos mayores, quien afirmó que Benjamín es un padre “amoroso, generoso y presente” y se filtró una charla íntima que tuvieron. Incluso su hijo Bautista escribió en sus redes que “quienes realmente conocen a su papá, saben cómo es”.
Mientras la China Suárez continúa con su descargo y se especula sobre un nuevo frente judicial, Vicuña eligió el silencio, la compañía de sus hijos y una imagen poderosa como mensaje. Sin palabras, reafirmó su rol de padre y mostró que, más allá del escándalo, hay un lazo que no se rompe.