La seguridad digital es uno de los temas más importantes en estos tiempos. Las estafas se renuevan día a día y los ciberdelincuentes aparecen con técnicas más nuevas y discretas cada vez que lo intentan. En el caso de la red doméstica, también es posible que te estés exponiendo a estos ataques si no tomas las precauciones necesarias.
Entre las posibilidades de ataques conocidos están los códigos informáticos maliciosos, mejor conocidos como virus o malware, estafas digitales llamadas popularmente phishing, y también ataques de denegación de servicio distribuidos que pueden interrumpir tu acceso a internet o comprometer información personal sensible.
Consejos de ciberseguridad para el uso de Starlink
Cuando contratás el servicio recibís un kit completo pensado para una instalación rápida y sencilla. Incluye la antena parabólica, el “plato” que se conecta directamente con los satélites, un enrutador Wi-Fi que distribuye la señal dentro de tu casa o negocio, un cable único que transmite tanto energía como datos entre antena y router, y un soporte o trípode para fijar el equipo en techos, patios abiertos o mástiles.
La ubicación de la antena es clave para lograr el mejor rendimiento. Lo ideal es elegir un lugar elevado y despejado, lejos de interferencias como árboles, postes, edificios o estructuras metálicas que puedan bloquear la señal. Para facilitar el proceso, la aplicación oficial de Starlink permite escanear el área antes de instalar y detectar posibles bloqueos que afecten la conexión.
La instalación inicial es sencilla. Solo tenés que descargar la aplicación desde Google Play o App Store, conectar la antena al router con el cable incluido, enchufar todo a la corriente eléctrica y seguir las instrucciones en pantalla. El sistema se enciende y la app detecta la antena automáticamente, guiándote paso a paso para verificar la ubicación y la calidad de la señal. Al finalizar, es fundamental cambiar el nombre de la red Wi-Fi y, sobre todo, la contraseña predeterminada.
La seguridad comienza por ahí. Usar contraseñas obvias o las que vienen por defecto es uno de los principales riesgos. Lo recomendable es crear una clave robusta, con más de doce caracteres, que combine mayúsculas, minúsculas, números y símbolos. Si se complica recordarlas, siempre es mejor recurrir a un gestor de contraseñas como Bitwarden o LastPass que ayude a mantenerlas seguras y organizadas.
Otro aspecto esencial es mantener el sistema actualizado. El firmware de Starlink, que funciona como el sistema operativo interno de la antena y el router, se encarga de corregir errores, mejorar el rendimiento y, lo más importante, cerrar vulnerabilidades de seguridad. Las actualizaciones suelen instalarse de manera automática, siempre que el equipo esté encendido, conectado a la corriente y recibiendo buena señal. Si se desconecta con frecuencia, estas mejoras pueden demorarse, por lo que conviene dejar el sistema en funcionamiento y revisar cada tanto en la aplicación si todo está al día.
La protección no termina en el kit de Starlink: también es necesario mantener actualizados los dispositivos conectados a la red, como computadoras, teléfonos o televisores inteligentes. Activar las actualizaciones automáticas, instalar un antivirus confiable y revisar periódicamente alertas de seguridad es clave para evitar que estos equipos se conviertan en puertas de entrada para ciberataques.
Además de contraseñas robustas, conviene verificar que el cifrado de la red sea WPA2 o WPA3, crear una red de invitados para visitas y, si buscás un nivel extra de privacidad, activar una VPN que proteja tu actividad en línea. El router de Starlink ya incluye un firewall básico, pero es recomendable asegurarse de que los firewalls individuales de cada dispositivo también estén habilitados.
La aplicación móvil es tu aliada para monitorear la red: desde ahí podés ver qué dispositivos están conectados, detectar intrusiones sospechosas y recibir alertas en caso de fallas. Si notás lentitud inusual, desconexiones frecuentes o la aparición de dispositivos desconocidos, lo mejor es cambiar contraseñas, reiniciar el equipo e incluso contactar al soporte de Starlink.
En Argentina, donde muchas veces la conectividad tradicional no llega con calidad, Starlink representa una transformación para conectar hogares y comunidades rurales. Pero para disfrutar de esa ventaja con tranquilidad es esencial cuidar la seguridad del sistema. Mantener el firmware actualizado, elegir contraseñas seguras, crear redes de invitados, usar una VPN y monitorear la red regularmente son pasos simples que convierten al usuario en el guardián de su propia conexión.