Cristina Kirchner decidió ponerle un corte final a la disputa con Axel Kicillof, el cuadro más importante del kirchnerismo tardío que la propia ex presidenta adoptó y formó para que sea su heredero.
Con su carta digital del lunes (que casi pasó inadvertida ante un día contaminado por la salida del cepo y la instrumentación de un nuevo esquema cambiario de bandas), la dos veces presidenta pareció flamear la bandera blanca ante la poderosa insubordinación del Gobernador de la provincia más importante del país.
“Cristina dio el paso que pedía Kicillof, aún aclarando con mayúsculas que no estaba de acuerdo. Evidentemente entendió que Axel estaba jugando en serio apalancado por más de la mitad de los jefes comunales del peronismo provincial“, señala un intendente del GBA parapetado en la vereda que en la disputa defendía a la Presidenta del PJ nacional.
En el peronismo bonaerense ya casi nadie descarta que habrá unidad para encarar las dos elecciones que se realizarán en la provincia: el 7 de septiembre las provinciales y municipales y el 26 de octubre las nacionales.
Ante este nuevo escenario de un acuerdo atado con alambre (pero acuerdo al fin) entre Cristina y Kicillof, tanto en La Cámpora como entre los sectores del resto del PJ entienden que la ex Presidenta finalmente no será candidata en el Conurbano.
Hace casi un mes la propia Cristina hizo trascender que ella podía encabezar la boleta de diputada provincial por la Tercera Sección electoral si Kicillof insistía con su proyecto de desdoblamiento en el momento de mayor tensión de la pelea. “Cristina va a mantener su candidatura en el GBA para pelear desde una mejor posición en la discusión del cierre de listas”, señaló un legislador cercano a La Cámpora. Otros dirigentes, en cambio, descreen de que insista con esa postulación.
La lista de candidatos a diputados y senadores provinciales (y de concejales y consejeros escolares municipales) se deben presentar a principios de agosto, un mes antes de la elección desdoblada del siete de septiembre. Hay tiempo.
“No van a haber, por lo menos por lo pronto, reuniones tripartitas entre Axel, Máximo y Massa. Es tiempo para desensillar y bajar varios cambios. La discusión, que será tensa y muy complicada, van a arrancar en julio“, anticipa uno de lo que estuvo en la mesa de negociación que terminó con Cristina y La Cámpora aceptando el desdoblamiento.
Tema no menor: ¿Cómo se ordenan las listas en el PJ? En septiembre el peronismo renueva la mitad de sus bloques en diputados y senadores. “Lo más lógico sería un tercio para cada uno“, reflexiona un ministro provincial en referencia al reparto de candidaturas entre La Cámpora, Kicillof y Sergio Massa.
Distinta será la pelea en las nóminas de candidatos para cargos municipales. En aquellos partidos gobernados por el PJ, los nombres los “ordenará” el intendente del distrito. Pero en las comunas que no administra el peronismo, como por ejemplo Tres de Febrero, podría haber más de una lista peronista a nivel municipal.
Acá se vendría una gran novedad: en La Plata piensan que Kicillof no vería mal firmar un decreto para que vuelvan las colectoras en la Provincia, una medida tan audaz como polémica. Con colectoras, el peronismo podría presentar varias listas de candidatos para la disputa de concejales y consejeros, que se sumarían mutuamente a una única nómina de candidatos a diputados o senadores, según sea el caso.
Para que nadie se quede enojado, la última carta que jugó el PJ fue presentar un proyecto en el Senado para bajar la prohibición de la reelección indefinida de los intendentes, que viene desde épocas del gobierno de María Eugenia Vidal con el apoyo de Massa. Un regalo que siempre está empaquetado para los poderosos jefes municipales.