Tras reunirse con jefes de bloque en la Cámara de Diputados, el gobierno de Javier Milei logró un avance clave en el dialogo con la oposición dialoguista que lo ayudaría a aprobar el 6 de febrero la suspensión de las elecciones PASO de este año, a la que pusieron como objetivo prioritario de las sesiones extraordinarias.
La intención de la Casa Rosada era eliminar las PASO definitivamente pero nunca encontró apoyo para eso en la oposición dialoguista. Ni siquiera en los aliados del PRO, que impulsan para la Ciudad de Buenos Aires una suspensión temporal. Ante ese escenario, el oficialismo se conformaría con la suspensión por única vez. “Saben que solo tendrían los votos para la suspensión”, deslizó a iProfesional una fuente con acceso a lo conversado en el encuentro de este martes.
Los referentes de los bloques Encuentro Federal, Democracia para Siempre (radicales no alineados con los gobernadores), Coalición Cívica e Innovación Federal, se habían negado a concurrir la semana pasada a la Casa Rosada para hablar sobre el temario de las sesiones extraordinarias convocadas hasta el 21 de febrero. “Las reuniones tienen que ser en el Congreso”, habían advertido.
Por esa razón, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y el jefe del bloque oficialista, Gabriel Bornoroni, armaron este martes un encuentro con todos ellos -y bloques más chicos- en el palacio legislativo para terminar de acordar una hoja de ruta que ya habían conversado con el PRO, la UCR y el MID y destrabar el acuerdo que necesitan para avanzar con la agenda del Gobierno.
Al término de la reunión, confiaban en haberlo logrado. El jefe del bloque MID, Oscar Zago, aliado de los libertarios, señaló que “hay consenso para la suspensión de las PASO, no así para la eliminación”, y adelantó que encontraron plafón para reunir a las comisiones los días 4 y 5 de febrero con el fin de emitir dictámenes sobre el proyecto y llevarlo al recinto el jueves 6.
Suspensión de las PASO: ¿por qué el Gobierno está más cerca de aprobar el proyecto?
“Ese es el esquema que quiere el Gobierno. No hubo compromiso”, aclararon en uno de los bloques dialoguistas que acompañaría la suspensión, ante una consulta de este medio. No obstante, entre los que asistieron el encuentro reconocen que, al aceptar la alternativa de la suspensión, el oficialismo está más cerca de juntar los 129 votos que necesita. “Si lo trabajan, sale”, pronostican.
Los representantes del oficialismo, a quienes se sumaron los funcionarios de Jefatura de Gabinete Lisandro Catalán y José Rolandi, dieron señales de que ya empezaron con ese “trabajo” para construir la mayoría: dejarían fuera del proyecto y patearían para marzo la discusión del capítulo que reforma el financiamiento público de la campaña electoral, que no encontraba apoyo de ninguno de los bloques.
Ahora, el relevamiento preliminar arroja que si los libertarios suman al PRO, la UCR, el MID, la Coalición Cívica, los monobloques aliados como Creo y las bancadas provinciales más chicas como Innovación Federal, junto a la mayor parte de Encuentro Federal -el más variopinto de todos, encabezado por Miguel Pichetto- podrían incluso superar los 130.
No obstante, en una Cámara de Diputados tan fragmentada y con un oficialismo tan necesitado de votos prestados, nada es seguro hasta el último minuto. En los bloques dialoguistas subsiste el malestar con el Gobierno por no haber incluido en el llamado a extraordinarias el Presupuesto 2025. Durante la reunión se lo reclamaron a los funcionarios.
En principio, esto no le impediría al Gobierno aprobar el proyecto. Al menos eso creen en el oficialismo y coinciden en algunos despachos opositores de la Cámara baja. Pero el clima sigue siendo tenso y La Libertad Avanza está cerca pero todavía no tiene un acuerdo totalmente cerrado. Por eso, al término del encuentro, Zago también dejó abierta la posibilidad de que haya una nueva reunión el próximo lunes para ultimar detalles.
Divisiones y un interrogante: ¿cómo votará Unión por la Patria la suspensión de las PASO?
Ocurre que tanto en Encuentro Federal como en la UCR hay posiciones divididas respecto de las PASO. En el bloque de Pichetto hay una mayoría que está de acuerdo con la suspensión pero hay un sector que se opone, mientras que buena parte de la bancada que preside Rodrigo de Loredo prefiere modificarlas para que le cuesten menos al Estado y, según deslizó una fuente radical a iProfesional, deslizan que para apoyar la suspensión van a “esperar a que el Gobierno junte los votos”.
En ese marco, todos miran a Unión por la Patria. En el bloque peronista/kirchnerista que lidera Germán Martínez un puñado de diputados simpatiza con la idea de suspender las primarias de este nuevo año electoral y en la oposición dialoguista entienden que si al Gobierno le faltaran votos es allí donde tendrán que buscarlos.
No obstante, en la bancada adelantan que no definirán una postura hasta el debate de comisiones, que sería el 4 de febrero. En rigor, esperan un pronunciamiento de la ex presidenta y actual titular del PJ, Cristina Kirchner, dado que la suspensión de las PASO a nivel nacional abriría la puerta a que haga lo mismo la provincia de Buenos Aires, en una decisión que impactaría en la interna que mantiene el kirchnerismo duro con el gobernador Axel Kicillof.
En cualquier caso, La Libertad Avanza logró un principio de acuerdo sobre la hoja de ruta que lleva optimismo al Gobierno sobre la posibilidad de avanzar en lo inmediato con un tema que en las distintas reuniones de los últimos días marcaron como prioritario entre los distintos proyectos que figuran en el llamado a extraordinarias de Milei, incluido Ficha Limpia.
¿Qué pasará con Ficha Limpia?: el punto más tenso de las extraordinarias
Como ocurrió en una reunión anterior que tuvo el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, con los bloques dialoguistas del Senado -que trataría la suspensión de las PASO en la semana del 13 de febrero si se aprueba la Cámara baja- los diputados se fueron del encuentro con la impresión de que al Gobierno solo le importa verdaderamente la reforma electoral.
“Ficha limpia les da igual, porque saben que si no se traba acá o se traba en el Senado”, deslizó una fuente de la oposición a este medio luego de la reunión, en referencia al proyecto que prohíbe quienes tengan una condena por corrupción en segunda instancia ser candidatos y que parece hecho a medida de Cristina Kirchner.
En cierta forma, los confirmó Pablo Juliano, jefe del bloque Democracia para Siempre que se opone a la suspensión de las PASO: “Se colocó en el temario lo de Ficha Limpia, pero en realidad no hay ninguna vocación ni ninguna voluntad de que esto termine prosperando. O sea, nos proponen postergar el tratamiento de Ficha Limpia, después del tratamiento de la eliminación de las PASO. Hay sólo una búsqueda electoralista, una agenda más de casta que de otra cosa”, chicaneó.
En rigor, la hoja de ruta que trazó el Gobierno es firmar el dictamen sobre las PASO el 4 de febrero y al día siguiente hacer lo mismo con Ficha Limpia, solo que esta iniciativa se trataría a la semana siguiente, el 11 de febrero. Previamente, en la sesión del 6, se votaría la suspensión de las PASO junto con los proyectos de juicio en ausencia y nuevo régimen penal de reiterancia, que tienen amplio consenso y por lo tanto, una aprobación casi asegurada.
La urgencia del oficialismo con la reforma electoral se justifica en que el plazo que fijó Milei para las extraordinarias es limitado -concluyen el 21 de febrero- y luego deberá votarla el Senado. Con las elecciones legislativas previstas para octubre, se necesitan certezas sobre para la organización por temas de logística. Que haya o no PASO altera los períodos legales de la campaña, la licitación para la impresión de boletas y demás cuestiones.
Por el momento, el gobierno de Javier Milei se aseguró al menos el plan para avanzar con la agenda de las sesiones extraordinarias y llegar a debatir en el recinto la suspensión de las elecciones PASO de este año. El diálogo que logró abrir con la oposición dialoguista lo dejó un poco más cerca de conseguir la aprobación, aunque todavía necesitará ajustar detalles para terminar de cerrar un acuerdo exitoso.