Senadores de Juntos por el Cambio reavivaron este miércoles la polémica por el controvertido caso de un radar que una empresa de capitales británicos instaló en Tierra del Fuego para vigilancia espacial y ante la presencia del canciller Santiago Cafiero acusó a los gobiernos nacional y provincial de «negligencia» al tiempo que pidió que «se hagan cargo» de la desmantelación de la antena.
El ministro concurrió al Congreso para responder sobre distintos temas diplomáticos, pero sin duda uno de los más espinosos fue el controvertido radar instalado en Tolhuin, que según denunció el senador radical Pablo Blanco «hasta el día de ayer estaba funcionando», pese a que había anunciado su intención de desinstalarlo, sobre todo después de un reciente incendio de unas viviendas cercanas a la antena de la empresa estadounidense LeoLabs.
Durante la reunión de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Blanco planteó que en un contacto que tuvo en las últimas horas con las autoridades del gobierno de Gustavo Melella, le dijeron que la responsabilidad de que siga funcionando el radar en Tierra del Fuego «la tiene que definir el ministerio de Defensa» y también señaló que si bien la empresa manifestó su intención de desmantelar el radar surgió la versión de que iban a retirar los capitales irlandeses e ingleses.
«La intención de que siga funcionando está y aparentemente quieren cambiar el estatus jurídico. No podemos tener un radar que no lo maneje el Estado nacional en una zona tan estratégica como Tierra del Fuego», protestó el senador radical
Por su parte, el riojano Julio Martínez le dijo a Cafiero que podrán «tirar la pelotita entre el gobierno nacional y la provincia pero es un elefante que pasó por el Enacom, por la Jefatura de Gabinete y al que el gobierno provincial le da luz y gas y todo lo que necesitan». Además, el senador afirmó que en este caso «hubo negligencia del gobierno nacional y provincial» e incluso alertó que este caso puede «afectar la seguridad jurídica» de la Argentina.
Frente a los reclamos de la oposición, Cafiero dijo que «no es opinable» si el Gobierno tomó conocimiento, y aseguró que «no hay ningún registro antes que le haya dado curso a la Cancillería cuando era un paso obligatorio». «El reclamo que pueda hacer la empresa es absolutamente abstracto porque no estaba autorizada a funcionar; la provincia se excedió en sus atribuciones», dijo el ministro de Relaciones Exteriores.
La oficialista María Eugenia Duré también se metió en la discusión cuando le preguntó al ministro si coincidía con un informe de Defensa que establecía que el desmantelamiento del radar correspondía a la provincia. Cafiero avaló ese documento, pero no precisó si desde nación habría alguna intervención para que se cumpla con la medida.
Tal como informó este diario, el caso del radar de Tolhuin generó polémica luego de que trascendiera que para constituir Leolabs Argentina, la casa matriz (de Estados Unidos) utilizó dos subsidiarias (y ello se presupone así que fue por motivos impositivos).
La principal subsidiaria es Leolabs Space Holdings Limited, que es una empresa registrada en la República de Irlanda y que tiene el 95% de las acciones de Leolabs Argentina. El 5% restante de las acciones quedaron para Leolabs Limited, que es una subsidiaria registrada en el Reino Unido.
Cafiero, que estuvo acompañado de Gabriel Fuks, subsecretario para América Latina, y Guillermo Carmona, secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, también respondió sobre el reclamo realizado desde Cancillería a Chile por la publicación del gráfico ilustrativo de los espacios marítimos de jurisdicción chilena en el que aparecen como propios espacios marítimos que pertenecen a Argentina.
«Lo que estamos tratando es que el gobierno de Chile se advengan al tratado de paz de 1984», dijo Cafiero, quien explicó que Chile hizo la presentación de su reclamo en 2021, luego de que el Congreso sancionara el mapa bicontinental que Argentina y que está avalado por tratados internacionales. Y en este sentido también acusó al gobierno chileno de que con su reclamo “viola el Tratado Antártico”.
Además, el canciller confirmó que el abogado Marcelo Cohen fue designado como representante argentino ante la comisión que tiene el Tratado de 1984 y reveló que desde hace un año se le solicita a Chile que designe a su representante en la negociación.
En la reunión con los senadores, Cafiero también respondió sobre la tensión diplomática que existe con Paraguay y explicó a partir de la construcción de la represa de Yacyretá y la soberanía de las islas de Apipé, que están dentro del territorio nacional, «hay una zona muy sinuosa donde el río es como una serpiente y es complejo seguir el límite». «Esto trajo acuerdos, pero muchos desencuentros con el gobierno paraguayo”, completó.