– ¿Cómo ve la primera semana de gobierno de Javier Milei?
– Pasó muy poco. Hemos visto que el modo en que se tomaron medidas generó incertidumbre. Es cierto que hay que resolver el déficit fiscal ahora porque no hay financiamiento, pero no creo que haya un solo camino. Veo que las medidas generan un impacto sobre la sociedad que ya viene muy golpeada con la pérdida del poder adquisitivo. Pero lo más preocupante es que no termina de ser un plan de estabilización. Le faltan condimentos para eso. Y falta que sea claro el cambio de época en cuanto a cómo se va a administrar el Estado, que es lo que votó la gente. Que quede claro adónde estamos yendo.
– ¿Qué postura va a tener Juntos por el Cambio frente a su gobierno? ¿Está rota la coalición?
– Lo más importante de JxC está ocurriendo a nivel provincial. Hay diez provincias donde gobierna y con alianzas mixtas. Producto de las decisiones del PRO, que tuvo un desembarco masivo de figuras en el nuevo gobierno, hubo una reconfiguración a nivel legislativo que vamos a ver cómo camina conforme a los proyectos que mande el Ejecutivo. Veremos si hay diferencias profundas, o no.
– Ustedes también tienen al radical Luis Petri en el gobierno, ¿qué van a hacer?
– Vamos a tomar una decisión colectiva. Yo creo que tiene que quedar claro que no representa al Comité.
¿El diálogo con Mauricio Macri está roto?
Algunos hablan más, otros menos. Veremos en el Congreso si estamos todos de acuerdo o no.
Dijo que Milei es un presidente institucionalmente débil, pero que no van a permitir que se use esa situación para abusar del poder…
Ha pasado en otros países y acá. Que arrancan débiles y después acumulan poder arrogándose atribuciones que corresponden a otros poderes del Estado.
¿Puede ocurrir con Milei?
No lo sé. En su discurso público se arroga representar ciertas cuestiones que no tiene que ver con la vida institucional habitual.
¿Cuando habla de «las fuerzas del cielo»?
Eso de ‘tengo un mandato específico que viene de un lugar que no son ustedes…’ Entonces espero, y creo que no va a pasar, pero figuras de otras partes del mundo que perciben su rol así tienden a acumular poder.
¿Milei les robó representación además de votos?
El voto es muy volátil. Algunos que votaron por Macri en 2015 después votaron a Alberto Fernández en 2019. Eso pasa en todas las democracias liberales. No creo que los votos se roben, cuando uno hace las cosas de manera equivocada y no hay mea culpa o no cambian las personas que están a cargo… eso alejó gente. No sabemos dónde va a estar esa gente después, pero tenemos que hacer la tarea de qué queremos representar. La agenda de basta de privilegios, del excesivo gasto sin beneficio a la sociedad es una agenda que hace rato venimos empujando. La explicamos de manera menos llamativa que Milei. Pero esa agenda va a sobrevivir, siempre. La gente la eligió. Lo que es importante es que le vaya bien a los argentinos.