21.7 C
Buenos Aires
27 noviembre, 2024

Denuncian que el principal aliado gremial de Barrionuevo causó destrozos en las oficinas de AYSA

En su acuerdo político con Javier Milei, Luis Barrionuevo comprometió el armado de una mesa sindical, al estilo de la que alguna vez consolidó en favor de Carlos Menem, para apalancar la candidatura presidencial del libertario. Sin embargo, hasta ahora ese propósito ha tenido un muy magro resultado para sus expectativas: tan solo el dirigente Oscar Rojas, titular del gremio de Maestranza -prácticamente un apéndice del sindicato gastronómico- se entusiasmó con el proyecto de su jefe sindical.

Así, apenas después de alinearse con Milei y con un guiño indisimulable de Barrionuevo, Rojas activó el jueves pasado una sorpresiva y violenta protesta en la sede de AYSA, la empresa estatal que lidera Malena Galmarini, la esposa del ministro-candidato Sergio Massa, con un llamativo reclamo: una supuesta deuda por aportes sindicales que tendría la firma tercerizada La Mantovana SA, que brinda servicios de mantenimiento a AYSA y que emplea a los trabajadores afiliados al gremio de Rojas.

Durante la manifestación, un grupo de militantes del sindicato barrionuevista irrumpió con panfletos y banderas en las oficinas de la empresa estatal, provocó destrozos en las instalaciones y agresiones a otros trabajadores de la dependencia, situación que determinó la intervención de efectivos de la Policía para contener a los manifestantes y evitar que escalen los incidentes.

Tras la protesta, la conducción de AYSA denunció penalmente a Rojas y al resto de la conducción del sindicato de Maestranza por los delitos de coacción, daño agravado y entorpecimiento de servicios públicos.

La denuncia, formalizada por la representante legal de la empresa, María José Labat, fue sorteada y quedó este miércoles en manos del Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 12, que instruirá ahora las medidas de prueba correspondientes.

Video

Se trata de Oscar Rojas, titular del gremio de Maestranza que apoya la candidatura presidencial de Javier Milei.

Según describe el texto de la denuncia al que tuvo acceso este diario: «Un grupo de personas ajenas a AySA irrumpieron de manera violenta, en la recepción del edificio de la calle Tucumán 752, con bombos y banderas al tiempo que mediante gritos y canticos insultaban de manera genérica a la empresa, su presidenta y a una de las firmas de limpieza que prestan servicios en AySA».

Y agrega el escrito: «Los agresores vestían chalecos y camperas con la inscripción del Sindicato de Maestranza. En todo momento mantuvieron una actitud desafiante e intimidante, impidiendo el normal funcionamiento de la empresa…y (gritando) palabras textuales de ´No nos vamos de acá hasta hablar con Malena porque estamos dispuestos a todo y si no nos atienden prendemos fuego todo´».

«Aparecieron sorpresivamente, nunca presentaron ninguna nota ni era un reclamo contra la empresa porque pedían por una supuesta deuda de una tercerizada con el sindicato. Todo muy raro, en medio de la campaña y justo después del apoyo de Barrionuevo a Milei», explicaron desde el entorno de Galmarini a Clarín en referencia a la protesta.

Fallido apoyo a Wado y sospechas por un misterioso crimen

Rojas, conocido en el mundo sindical como «Rojitas» o «recontralcahuete» de Barrionuevo, conduce desde hace años el Sindicato de Obreros de la Maestranza, cargo que renovó por otro mandato de cuatro años en julio pasado.

El dirigente es, junto al gastronómico, uno de los referentes sindicales más enfrentado al kirchnerismo aunque previamente a encolumnarse con el proyecto Milei, había adherido a la fallida precandidatura presidencial de Eduardo Wado de Pedro, en línea con el aval de su jefe político.

Barrionuevo y Rojas con Wado de Pedro en junio, cuando apoyaban su precandidatura presidencial.Barrionuevo y Rojas con Wado de Pedro en junio, cuando apoyaban su precandidatura presidencial.Más allá de sus contradicciones políticas, el nombre de Rojas se emparenta desde hace años con la polémica, los escándalos y hasta con un misterioso crimen ocurrido en 2011 y que aún no fue esclarecido: el asesinato Roberto Roger Rodríguez, el tesorero del gremio y titular de la obra social, que le disputaba a Rojas su conducción sindical.

La propia familia de Rodríguez acusó al aliado de Barrionuevo de ser el autor intelectual del homicidio en el marco de «una interna sindical por las elecciones en el sindicato», según la denuncia que formalizaron ante la Justicia, aunque la acusación nunca fue corroborada.

Dos años después otra vez Rojas fue protagonista de otro llamativo caso policial luego que se conoció que habría pagado la suma de 120 mil dólares para liberar a uno de sus hijos que había sido víctima de un extraño secuestro en la zona sur del conurbano bonaerense.

Últimas Noticias
NOTICIAS RELACIONADAS