Mientras avanza la discusión sobre el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) a la par que se suman críticas como las de la Unión Industrial Argentina (UIA)-, el oficialismo busca que el Senado apruebe la iniciativa a la que Diputados le dio luz verde, aunque no descarta aplicar cambios para lograr el consenso de las voces disidentes.
Son cinco los sectores que, principalmente, el Gobierno quiere que despeguen con el impulso de grandes capitales de más de US$ 200 millones y ventajas impositivas, libre disponibilidad de divisas y facilidades a 30 años.
El régimen contenido en la Ley Bases pone la lupa en energía, infraestructura, agro, minería y economía del conocimiento. “Se apunta a inversiones en mineras, puertos e infraestructura”, le explicaron a Clarín desde el Ministerio de Economía.
Energía
La mayor apuesta del RIGI es hacer del sector energético “otro complejo sojero” con el desarrollo del gas natural licuado (GNL). Para YPF, este régimen es una manera de darle seguridad jurídica, fiscal e impositiva al megaproyecto que encara con la petrolera malaya Petronas, que requiere US$ 50.000 millones para la construcción de plantas de licuefacción y la infraestructura necesaria para producir y exportar GNL.
El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, aseguró la semana pasada que la iniciativa está sujeta a la aprobación de la Ley Bases y anticipó que piensa asociar a toda la industria petrolera a “Argentina GNL”, la obra que se proyecta como la más grande en infraestructura de la historia del país.
Horacio Marín, presidente y CEO de YPF. Foto: archivoEn ese sentido, para la petrolera estatal es fundamental el RIGI, ya que sin GNL no se va a poder exportar todo el gas de Vaca Muerta. Precisó que no hay posibilidades de que un proyecto de estas características –con una obra faraónica de tres gasoductos, dos barcos de 400 metros de eslora y un puerto– lo haga cualquier empresa.
Al respecto, apuntó que se requiere la inversión de un partner fuerte, ya que no solo beneficiará a YPF, sino a toda la industria y al país, dada la previsión de exportaciones para los próximos 30 años, con una estimación de US$ 31.000 millones entre petróleo y gas hasta 2031. “Con esto, los problemas de divisas se resuelven para siempre”, destacó la empresa.
En tanto, Marcos Bulgheroni, Group CEO de Pan American Energy (PAE), le explicó a Clarin el potencial de Vaca Muerta: “Tiene recursos equivalentes a seis veces el consumo de energía de la Argentina en los próximos 20 años, incluyendo las exportaciones regionales y los proyectos para el desarrollo del GNL”.
Marcos Bulgheroni, CEO de Pan American Energy (PAE). Foto: archivo“Tenemos el desafío de hacer de la Argentina un polo exportador. Se necesita un marco estable no solo para los jugadores locales, sino también para los de afuera, para así competir con países como los Estados Unidos. El contexto local no es suficiente para estos proyectos, se debe atraer financiamiento externo”, señaló una fuente del sector.
“Los desembolsos que se calcula que se necesitan triplican las inversiones de la industria en un solo año de US$ 10.000 millones. Y el repago es a largo plazo, entre ocho y 10 años. Por eso, deben estar resguardadas. Esto generaría superávit de la balanza energética y empleo de calidad”, agregó.
A su vez, este martes, en el Hotel Libertador del centro porteño, en uno de los tradicionales almuerzos del Club del Petróleo, el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, expresó que “se debe aprobar el capítulo de hidrocarburos y el RIGI, un despegue para Vaca Muerta y el país”.
Infraestructura
Las obras de infraestructura son otro objetivo, por ejemplo, en Vaca Muerta, para aliviar el cuello de botella en la evacuación de crudo en el sur de la cuenca para descomprimir el área norte –hasta donde se suele trasladar la producción–, logrando mayor eficiencia tras el incremento de actividad que registra la formación neuquina.
En ese sentido, se buscan replicar proyectos como el oleoducto de 100 kilómetros de Shell, PAE y Pluspetrol, y el de 250 kilómetros de Oldeval, que prevé en mayo de 2025 concluir la tercera etapa, pasando de 30.000 metros cúbicos a 80.000.
El oleoducto entre Sierras Blancas (Neuquén) y Allen (Río Negro) de Shell, PAE y Pluspetrol. Foto: archivoTras las demoras por el cambio de Gobierno, para septiembre se espera que esté lista la Reversión del Gasoducto Norte, una obra clave para llevar gas a las provincias del norte y oeste, sustituir importaciones de Bolivia y exportar a Brasil. En la industria remarcan la relevancia del RIGI, ya que demandó un aporte de US$ 710 millones, de los cuales 540 millones provienen de un crédito del Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe (CAF), en tanto hacen referencia a que falta que se retome el segundo tramo de la licitación del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner.
Agro y minería
Agro es otro de los sectores en la mira, aunque hubo rechazo de entidades como la Fundación Barbechando, que planteó la necesidad de que las pymes nacionales estén alcanzadas. Y en minería, hay proyectos en espera desde hace años como Los Azules, en San Juan, de la canadiense McEwen Copper.
Según la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), el RIGI es esencial para ponerlos en marcha con un marco de certidumbre: “Es fundamental para que se concreten inversiones en cobre, litio, oro y plata, que permitirían triplicar las exportaciones con competitividad, un plan de largo plazo y generación de empleo para el desarrollo de zonas que no cuentan con otras industrias”.
Proyecto de cobre Los Azules, en San Juan, de la canadiense McEwen Copper. Foto: archivoHacia 2030 se estiman inversiones cercanas a US$ 25.000 millones. Hay distintos escenarios: el litio en pleno desarrollo con fuerte participación de proveedores locales, el cobre con el inicio demorado de proyectos de envergadura, y la mayoría de yacimientos de oro y plata (que representan el 70% de las exportaciones) en declive productivo.
Economía del conocimiento
La economía del conocimiento fue una de las pocas industrias que creció en 2023, aunque perdió competitividad por la inestabilidad y la creciente fuga de talento. El año pasado, tuvo otro récord histórico: aumentó un 2,9% sus exportaciones -a U$$ 8.104 millones, con un saldo del comercio exterior positivo en US$ 384 millones– y generó 3,6% más de empleo, comportamiento que se destacó por sobre la evolución negativa de otros sectores, de acuerdo a Argencon.
Incluso en medio de la crisis, aumentó su participación en la economía nacional: ya ocupa el tercer puesto en las exportaciones del país, detrás del campo y el complejo automotriz, con 9,7% del total y 7,3% del empleo registrado, con 494.000 puestos laborales, mayormente, en servicios profesionales, informática y software.
El país es uno de los líderes de la región en investigación clínica. Foto: archivoPero además de los servicios que proveen las filiales locales de multinacionales o trabajadores autónomos para el exterior, el plan es hacer del país un polo exportador de ciencia, con desarrollos y estudios de vanguardia en tratamientos y vacunas.
Por caso, la inversión anual en actividades de innovación ronda los US$ 91,4 millones por parte de empresas de biotecnología y US$ 1,8 de nanotecnología, según la Cámara Argentina de Biotecnología. A su vez, el país es uno de los líderes de la región en investigación clínica, con más del 40% de la inversión del empresariado argentino. En esa línea, el laboratorio MSD acaba de anunciar US$ 35 millones para innovar en terapias oncológicas y vacunas, entre otros campos.